El Jamón Ibérico en Navidad, por ser el producto más representativo de la gastronomía en España, el más exclusivo y exquisito que estas fechas hacen que esté en todas las mesas de celebración, es además, el producto que más procuramos consumir en estas Fiestas Navideñas, sin quitar también que es uno de los más saludables.
Sin embargo, como la mayoría de alimentos más exclusivos, el Jamón Ibérico, y sobre todo el Jamón Ibérico de Bellota de Excelencia de Monesterio, requiere de ciertos cuidados especiales, es por eso que aconsejamos una serie de recomendaciones para conservarlo en buenas condiciones, para que no lleguen a producirse cambios en su propiedades organolépticas.
Por ello, si eres consumidor de este exclusivo manjar, debes tener en cuenta estas recomendaciones para conseguir una conservación ideal, hasta y durante el momento de su consumo, en estas próximas Celebraciones Navideñas.
Para mantener un buen Jamón Ibérico en perfecto estado durante su consumo, hay que tener en cuenta la temperatura a la que lo mantendremos, tanto en su conservación como durante el tiempo que se esté consumiendo. Para ello, la temperatura correcta debe mantenerse uniforme, y siempre entre los 10 y 17 grados Centígrados
Al igual que evitar tener el Jamón Ibérico cerca de fuentes de calor, también hay que evitar que esté expuesto a fuentes de luz, por lo que se recomienda mantenerlo en un lugar sin que le incida la luz directa.
Para empezar a cortarlo, tendremos en cuenta que, para realizar un buen trabajo, aunque no seamos muy expertos, hay que disponer de buenas herramientas. Para ello, contaremos con un jamonero donde irá apoyado y sujeto, un buen cuchillo jamonero y un cuchillo de hoja ancha, con el que daremos los primeros cortes a la parte más dura y empezaremos a limpiar toda la corteza de la superficie y el tocino de la zona que vayamos a ir consumiendo. Posteriormente, utilizaremos el cuchillo jamonero para ir sacando lonchas homogéneas muy finas de unos 4 centímetros de longitud, procurando llevar siempre el corte lo más recto posible, para así, ir aprovechando mejor todas las partes de la pieza, hasta el final. Para un consumo en casa, se recomienda empezar el corte, siempre, con la pezuña hacia abajo, para consumir primero la parte más seca y dura.
Una vez que se esté consumiendo, y para evitar la oxidación del corte, se aconseja cubrirlo con una buena loncha de tocino, que hemos ido eliminando en el comienzo de apertura y limpieza de la corteza, para que el propio tocino mantenga jugosa toda la superficie de corte hasta que sigamos cortando. Y una vez terminado el corte, cubierto con la loncha de tocino y con un paño seco de algodón.
Por último, hay que tener en cuenta que el consumo del Jamón Ibérico, en casa, debe ser continuo, sin que pase mucho tiempo entre corte y corte, por lo que es recomendable que la pieza sea terminada antes de un mes desde el comienzo, y así, podamos disfrutar del mejor Jamón Ibérico en Navidad.
Fuente de enlace: «Directo al Paladar – El Sabor de la Vida»
www.excelenciademonesterio.com